El corazón está formado esencialmente por cuatro cavidades, 2 aurículas (cavidades superiores) y 2 ventrículos (cavidades inferiores). Estas cavidades se encuentran separadas la una de la otra por unas estructuras dinámicas llamadas válvulas.
La función de las válvulas cardiacas es permitir el paso de sangre de una cavidad a otra en una sola dirección (anterograda). La regulación de este proceso está coordinado por cambios en la presión dentro de las cavidades cardiacas lo que permite el vaciado de una cavidad de mayor presión a otra de menor presión.
Al mismo tiempo las válvulas permiten que la cavidad que no está bombeando de manera activa inicie su proceso de llenado para prepararse para la siguiente contracción. Existe varias situaciones que pueden producir mal funcionamiento en el aparato valvular, generalmente se pueden dividir en 2 grades grupos. Las que impiden su apertura provocando que la cavidad no pueda verter su contenido dentro de la siguiente o que para lograrse deba producirse ante un aumento exagerado de la presión en la cavidad en cuestión.
El otro escenario es cuando la valvular no produce el sellado adecuado para impedir que la sangre viaje en sentido retrogrado lo cual genera una sobrecarga de volumen en la cavidad anterior a la válvula. Ambas situaciones crean disturbios Hemodinámicos que provocan deformidad y el fallo del corazón como bomba. Dependiendo cual sea la valvular en cuestión existe una posible forma de reparación.
La mayoría de los problemas valvulares pueden corregirse mediante cirugía cardíaca de reemplazo valvular (biológico o metálico) o reparación de su anillo. También existen varias alternativas de tratamiento de esta entidad que se pueden realizar mediante cateterismo cardíaco, algunas como tratamiento paliativo (Valvuloplastía con balón de válvula aortica o mitral) y otras como tratamiento definitivo, la más desarrollada hasta ahora el implante percutáneo de válvula aortica.
Inicialmente el reemplazo percutáneo de válvula aortica se reservaba para pacientes que por su fragilidad no podían recuperarse de la cirugía de reemplazo valvular. Actualmente este procedimiento va ganando terreno por sus excelentes resultados en paciente de riesgo cardiovascular moderado. En el procedimiento de Valvuloplastía con balón lo que se busca es la ampliación del orificio valvular disponible para facilitar el vaciado de la cavidad anterior a la valvular, esto puede funcionar prácticamente para todos las válvulas del corazón. Se realiza mediante la creación de un acceso femoral arterial o venoso dependiendo la válvula en cuestión y con el inflado de un catéter balón sobre el orificio estrechado, posteriormente este balón es insuflado y llevado a altas ATM lo que permite ejercer una presión circunferencial que provoca el ensanchamiento del orificio valvular.
El reemplazo valvular percutáneo tiene cierta similitud con la Valvuloplastía con la diferencia de que en el lugar de la antigua valvular remodelada se deja una estructura de andamiaje que contiene un sistema valvular artificial que realiza exactamente la misma función que una valvular nativa.